¿Cuánto aumentaron de precio algunos autos durante el último año?

No para el aumento de precios en los automóviles y en 12 meses todos los fabricantes incrementaron el costo de sus productos.

Hace un año hicimos un especial en el que les contamos cuánto habían subido de precio, a raíz del inicio de la pandemia, algunos de los automóviles que se venden en el país. Tras un año de condiciones poco certeras o favorables para el mercado automotriz mexicano, quisimos hacer el mismo análisis, comparando los precios que existían en abril de 2020, con los expuestos durante este mes.

Antes que nada, debemos aclarar que para este ejercicio comenzaremos con las marcas generalistas que hace un año sí incrementaron sus precios en algunos productos, es decir, Mazda y Volkswagen. Posteriormente mencionaremos a BMW y Mercedes-Benz, en representación de las marcas premium.

Fabricantes generalistas

Comenzando por la marca de origen japonés, evidentemente todos sus modelos subieron de precio, pero además ocurrió algo muy curioso: el 100% de su gama ya sobrepasa el rango de los $300,000 MXN, incluyendo las versiones de entrada de Mazda 2.

Mazda 2 hatchback y sedán pasaron de $282,900 y $262,900 MXN a $323,900 y $303,900 MXN. Mazda 3 hatchback y sedán costaban $372,900 y $342,900 MXN y ahora se encuentran en $412,900 y $382,900 MXN. El resto de la gama tuvo un incremento de entre $7,000 MXN (CX-3) y $40,000 MXN, salvo Mazda 6, que se encareció cerca de $90,000 MXN, aunque esto se debe a que actualmente sólo se ofrece el Carbon Edition.

Pasando a Volkswagen, también todos los automóviles incrementaron su precio, aunque algunos aumentos resultaron más fuertes que otros. Por ejemplo, Polo y Vento se encontraban en $229,990 y $224,990 MXN, y ahora los mismos autos cuestan $246,990 y $244,990 MXN. Virtus estaba en $279,990 y llegó hasta $292,990 MXN. Jetta declaraba $320,990 y su etiqueta actual es de $351,990 MXN.

Todos los SUV aumentaron entre $40,000 y $60,000 MXN. La escalada más fuerte la registró GTI, aunque no es tan precisa, ya que el modelo que se vende actualmente es el Oettinger, que es una edición especial; en concreto un GTI costaba $575,990 y el modelo mencionado está en $687,990 MXN.

Por último, sólo nos queda mencionar que Gol y Golf salieron del portafolio, pero se integraron Taos y Cross Sport.

Las marcas premium también subieron los precios de sus autos

Comenzando por BMW, notamos que sí hay un incremento, pero este resultó considerablemente mayor que el de los autos generalistas. Por ejemplo: Serie 1 118i comenzaba en $599,900 MXN y ahora está en $670,000 MXN, pero la versión con tracción integral (M135 xDrive) pasó de $889,900 a $1,030,000 MXN.

Eso no es todo, el Serie 3 320iA mostraba una etiqueta de $679,900 MXN y ahora está $100,000 MXN arriba ($780,000 MXN). La versión más equipada y deportiva sufrió aún más, ya que los clientes tenían que desembolsar $1,099,900 y en 2021 el mismo auto ya cuesta $1,280,000 MXN.

El caso de los SUV más pequeños es igual, ya que las versiones base de X1 y X2 subieron más de $100,000 MXN, aunque los más equipados incrementaron entre 75 y 90 mil pesos. La excepción es X3 sDrive20i, que tuvo un aumento de $187,000 MXN (antes costaba $788K y ahora está en $975,000 MXN).

La historia de Mercedes-Benz es un poco distinta, debido a que la familia de sedanes tuvo incremento de aproximadamente $50,000 MXN (Clase C), $70,000 MXN (Clase A sedán) y $141,000 MXN (Clase E). La única excepción resulto Clase S, pasando de $2,025,000 a $2,523,900 MXN, aunque esto se explica por el cambio generacional del auto.

En cuanto a la familia de camionetas pudimos notar dos situaciones curiosas: GLA se disparó de $584,000 a $862,900 MXN (también cambió de generación), y el precio base de GLB disminuyó de $859,900 a $819,900 MXN; la razón es por la llegada de la versión 200 Style (antes sólo se vendía 250 4MATIC). El resto de SUVs subieron entre $108K y $163K pesos.

Estos sólo son unos cuantos ejemplos del aumento de precios que se registra periódicamente en nuestro mercado. No obstante, es importante decir que la mayoría de estos cambios corresponden a ajusten inflacionarios, y que, pese a que muchas de estas cifras ya se colocan en niveles restrictivos para gran parte de la población, las etiquetas no se reducirán, sino todo lo contrario. Con el paso del tiempo veremos vehículos más y más caros.