El Ferrari SP48 Unica es un one-off que muestra el poder del dinero

Este Ferrari SP48 Unica se hizo bajo pedido de un comprador especial, que no quería un Ferrari F8 Tributo cualquiera.

Sabemos que las marcas de lujo son sumamente exclusivas, pero inclusive dentro de ellas mismas existen divisiones todavía más inalcanzables. Ferrari no es la excepción y aunque sabemos que no cualquiera puede comprar un Cavallino Rampante, los de Italia cuentan con un programa denominado “Special Projects” para dueños más adinerados. Es así que surge el SP48 Unica.

Un F8 Tributo con varias mejoras especiales

A grandes rasgos, esta creación especial es un F8 Tributo, al menos lo es en la base del vehículo, pues el exterior refleja varios cambios que hacen la diferencia entre el modelo tradicional y este one-off.

Flavio Manzoni fue el diseñador a cargo de realizar el proyecto, en el cual el dueño se involucró en todo momento, de hecho, Ferrari afirma que el comprador estuvo en contacto y aportando sus ideas para lograr la apariencia de este deportivo.

Es la frontal lo que muestra los primeros cambios, adoptando una nueva fascia con un patrón impreso que otorga una sensación más sofisticada. El mismo patrón se replica en la parte posterior, donde se decidió eliminar la ventana trasera y colocar una singular cubierta con tintes más agresivos.

Nuevas luces, elementos aerodinámicos como entradas de aire y extractores de calor, así como un spoiler fijo, también son parte de la nueva apariencia del otrora F8 Tributo, que utilizó tecnología de impresión 3D para lograr esta renovada cara.

Del interior no existen imágenes oficiales, pero la marca confirma que el cliente eligió el mismo patrón hexagonal del exterior, además de vestiduras de Alcantara para los asientos, tablero y otros elementos del habitáculo.

Pese a lo distinto del vehículo, Ferrari mantuvo la mecánica que ya conocemos, con el mismo V8 de 3.9 litros biturbo con 720 caballos de fuerza y 557 lb-pie de par, que es capaz de alcanzar hasta 340 km/h, según los italianos.

Como era de esperarse, los del cavallino rampante mantuvieron el secreto de la identidad del comprador, y tampoco dieron a conocer cuál fue el precio que tuvo que pagar el adinerado dueño de el único SP48 Unica del mundo.