El Opel Rocks-e Kargo revela el transporte de entregas del mañana

El Opel Rocks-e Kargo no se cataloga como un coche, pero el concepto es más que interesante para el sector comercial de “última milla”.

La industria del automóvil trabaja en un sinfín de soluciones para diversas necesidades y una de ellas es el de las entregas. Es así que Stellantis nos muestra, a través de Opel, al nuevo Rocks-e Kargo, un vehículo eléctrico diseñado para pequeñas cargas que se deben entregar en distancias cortas.

Obviamente, el medio de transporte se presentó en Europa, pero no como un coche, sino como un “cuadriciclo” según la Unión Europea, además, su diseño demuestra que sí cumple más con la función de carga que con la de movilidad.

Pequeño, pero funcional

El pequeño city car tiene un diseño digno de un concepto, con las claras líneas rectas y la forma de caja que, de hecho, termina por beneficiar a su función primaria. Mide apenas 2.41 metros de largo y uno 1.39 metros de ancho, para un espacio interior de objetos de hasta 1.2 metros.

La cabina de este vehículo, a diferencia del Citroen My Ami Cargo, modelo en el que se basa, elimina las plazas traseras para albergar más espacio de carga. De hecho, el piso del medio de transporte permite cargar un volumen de hasta 400 litros u objetos con un peso no mayor a 140 kilogramos.

El tren motor de esta unidad es sumamente modesto, con una batería de 5.5 kWh, capaz de entregar 8 caballos de fuerza de manera continua, o un pico de hasta 12 caballos de fuerza de manera temporal.

Dicho conjunto refuerza el concepto de coche citadino, pues solo tiene una autonomía de hasta 75 kilómetros, aunque tiene la gran ventaja de recargarse completamente en un cargador de casa regular en solo cuatro horas.

Stellantis comenzará a recibir órdenes de este producto este mismo año, aunque por ahora solo en Europa, siendo Alemania y Holanda los primeros en ofrecer al subcompacto eléctrico.